Yoga para desarrollar la confianza
Hay muchas razones por las que podemos perder la confianza en nosotros mismos y en los demás. A menudo, esa sensación de inseguridad y miedo se explica en decepciones del pasado, frustraciones, errores y otros factores que, a su vez, afectan nuestra autoestima. Sin embargo, gracias a la meditación para la confianza, podemos empezar a soltar todas estas cosas para que no interfieran en los ámbitos más importantes de nuestra vida.
La practica de yoga desarrolla confianza es un tipo de meditación que va dirigida específicamente a cultivar nuestra autoconfianza y autoestima. Como lo destaca una columna en The Journal of Perinatal Education, la confianza no es algo que se aprende como si se tratase de un conjunto de reglas, sino que es un estado mental. Así, desarrollar el pensamiento positivo, practicar, capacitarse y estar en contacto con otras personas puede ser útil para incrementar nuestros niveles de confianza.
Por tanto, al ser una vía para aprender todas estas cosas, el yoga se convierte en nuestro gran aliado si nuestra confianza está quebrantada. Incluso, entrenarla nos ayuda a tener más determinación cuando llega el momento de afrontar retos nuevos o situaciones donde tememos a lo desconocido.
¿Por qué practicar yoga?
Para entender por qué es importante practicar la meditación para la confianza, primero tenemos que hacer un breve repaso en su significado. La confianza ha sido definida como “la seguridad o esperanza firme que alguien tiene sobre sí mismo, otra persona o algo en específico”. A su vez, la confianza proviene de sentimientos de bienestar, aceptación de nuestro cuerpo y mente, experiencias sociales, habilidades y de las creencias sobre nuestras capacidades.
Para desarrollar este sentimiento, tanto hacia nosotros mismos como hacia los demás, debemos superar experiencias negativas que suelen afectarla. Además, nos vemos obligados a fortalecer nuestra autoestima, pues va muy ligada a esa sensación se seguridad. ¿Y qué tiene que ver la meditación para la confianza? ¿Por qué deberíamos interesarnos en su práctica?
Pues bien, la respuesta a estos interrogantes es simple. La meditación, al ser una disciplina que nos enseña a vivir el “aquí y el ahora”, es una gran vía para desprendernos de esos pensamientos obstructivos que afectan nuestra capacidad de confiar. Además, su práctica nos permite liberarnos de juicios, preocupaciones, frustraciones y otras emociones negativas que impiden que nos sintamos seguros cuando tenemos que afrontar determinas circunstancias.
Por otro lado, cultivar la autoconfianza con la meditación nos prepara para asumir nuevos retos. Ya sea que estemos liderando un proyecto importante, o bien, que estemos próximos a nuestra primera cita, esta forma de meditación nos ayudará a actuar de forma más segura y convincente. A su vez, entrenarla nos ayudará a mejorar nuestra capacidad para tomar decisiones y resolver problemas.
Beneficios de desarrollar la confianza
Llegados a este punto, ya reconocemos algunos de los beneficios de practicar yoga para desarrollar la confianza. Sin embargo, queremos destacarlos de forma especial, ya que así estarán claras las razones para ponerla en práctica:
- Nos ayuda a desarrollar habilidades de líderes. Según un reciente estudio publicado en la revista académica Frontiers in Psychology, la práctica de mindfulness o atención plena que se desarrolla con la practica de yoga, que es una forma de meditación, facilita la efectividad del líder, ya que entrena la autocompasión, la empatía y otras emociones que inciden en el éxito del trabajo en equipo.
- Fortalece nuestra autoestima. Como hemos mencionado, desarrollar la confianza tiene mucho que ver con la autoestima. Cuando logramos confiar en nosotros mismos, la percepción que tenemos sobre nosotros se vuelve positiva y empezamos a tener más seguridad cuando tenemos que asumir desafíos.
- Aumenta el pensamiento positivo. Confiar es pensar que todo estará bien, sin importar las circunstancias. Por ello, nos sirve para acabar con esos pensamientos negativos que nos obstruyen (miedo, ira, inseguridad, envidia, etcétera). En su lugar, empezamos a gestionar emociones que nos mantienen positivos.
- Mejora nuestras relaciones interpersonales. La confianza que desarrollamos con la practica de yoga no solo está dirigida hacia nosotros mismos; también nos ayuda a volver a confiar en otras personas, sobre todo cuando hemos atravesado decepciones pasadas. Esto es muy importante, especialmente en lo que tiene que ver con las amistades y la parte sentimental.
- Elimina el miedo a hablar en público. Uno de los miedos más frecuentes que tenemos, es el tener que hablar en público. Ya sea en un evento, el lugar de trabajo o la universidad, el tener que expresarnos ante otros nos produce inseguridad y ansiedad. Al fortalecer la confianza sobre nosotros, este temor desaparece y empezamos a hablar con más fluidez y determinación.
Desarrollar la confianza para presentaciones y discursos
Hay momentos en los que volver a la respiración y a la conexión con nuestro cuerpo, gracias a la práctica de yoga, nos hace volver a la confianza. Por ejemplo, cuando tenemos que hacer presentaciones o dar discursos, ser conscientes del cuerpo y de la respiración nos ayuda a paliar la ansiedad y los nervios que nos invaden en esos momentos. Si bien algunos se sienten cómodos y tranquilos en estas circunstancias, una gran parte de la población experimenta ansiedad, miedo y otras emociones que interfieren con el rendimiento. Una investigación publicada en Social Psychological and Personality Science destacó que “aquellos con un buen control de atención estaban protegidos contra los efectos perjudiciales del miedo a hablar en público”. La consciencia meditativa desarrollada con la practica de yoga, facilita este proceso. Incluso, tiene otros efectos positivos en la autorregulación emocional porque nos hace cambiar de perspectivas.
Cómo practicar la meditación para la confianza
Debemos entender que no es un proceso fácil que se consigue de la noche a la mañana. Debido a esto, la practica de yoga nos llevan a vivir un entrenamiento gradual cuya finalidad es hacer más fuerte nuestra capacidad de confiar. Como siempre, recomendamos buscar un lugar tranquilo y silencioso para su práctica. Además, en lo posible, debemos repetirlo todos los días para que haga efecto.
Un sencillo ejercicio para comenzar:
- Una vez estés en un lugar silencioso, cómodo y libre de cualquier distractor, siéntate en posición de loto, es decir, la posición clásica de yoga. Si lo prefieres, asienta las manos sobre las rodillas. El resto del cuerpo, mantenlo erguido, pero sin tensarlo.
- A continuación, cierra los ojos y practica la respiración profunda. Inhala de manera pausada y profunda, y exhala de la misma forma. Debes sentir todo el proceso, por varios minutos.
- Ahora, concéntrate en el sonido de tu corazón y piensa que esos latidos marcan los pasos que das hacia los objetivos que quieres lograr.
- Enseguida, sin dejar de respirar profundo, trata de visualizar aquellas experiencias que quebrantaron tu confianza. ¿Alguien te falló? ¿Cometiste un error? ¿Algo te hizo sentir avergonzado?
- No te hagas reproches, acepta esas experiencias como parte de lo que eres ahora, pero suelta las emociones negativas que te producen. En este punto, procura pensar en el lado amable y céntrate en tener pensamientos positivos. Repite frases como: “yo puedo ser feliz, tengo todo para lograrlo” o alguna similar que prefieras.
- Lo cierto de todo es que tienes muchas habilidades para ser la persona que has soñado. Por eso, ahora visualiza que estás dejando la timidez y te estás arriesgando a hablar en público, o bien, a una persona en particular. Imagina que haces eso que siempre has querido, pero no lo has hecho por temor.
- ¿Empiezas a sentirte más seguro? ¿Sientes que los miedos se alejan? Es momento de apoderarse de esos sentimientos de autoconfianza y buena autoestima. Esa sensación de bienestar y seguridad es la que tratarás de mantener a partir de ahora.
- Respira hondo, relaja tu cuerpo y vuelve a tus rutinas. Sin embargo, en cada acción que hagas, trata de sacar a flote esa confianza que experimentaste con tu cuerpo en la practica de yoga. Cuánto más lo entrenes, más fácil resultará este proceso.
Dicho de otro modo, procuraremos mantener lo más conscientes y alerta que podamos para no dejar que la mente se invada de pensamientos obstructivos. Cuando pase esto, pausamos, respiramos y tratamos de “desvanecerlo” hasta volver a experimentar las sensaciones del momento presente durante la practica del yoga así como en el día a día.
Namasté
Equipo Yoga Kalash
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